A pesar de la protección, o precisamente por ella, 1.431 autónomos del transporte ligero se han visto obligados a abandonar la actividad de manera forzosa en el primer semestre de 2013, aunque hay que decir que han sido 834 menos que en el mismo periodo del año pasado, según los datos de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), a partir de los registros de la Seguridad Social. De ellos, más de un 60% trabajan para una sola empresa, por lo que son considerados trabajadores autónomos económicamente dependientes. Y es que, a pesar de que el Estatuto del Trabajo Autónomo protege la figura del Transportista TRADE, las empresas se niegan en redondo a aceptarles esta condición, dando como consecuencia el despido de estos profesionales.
“Las empresas de transporte no han llegado a entender que para ellas también supone una ventaja acreditar la condición de TRADE a sus transportistas autónomos, ya que el contrato a firmar entre las partes especifica tanto los derechos como las obligaciones de ambos”, comenta Eduardo Abad, coordinador nacional del Área de Transporte de UPTA España.
No obstante, UPTA España espera que con la pasada aprobación de la nueva Ley reguladora de la Jurisdicción Social, que ha incorporado una modificación del Estatuto del Trabajo Autónomo por la que el carácter escrito de los contratos entre los trabajadores autónomos económicamente dependientes y sus empresas tiene carácter exclusivamente declarativo y no constitutivo, represente una evolución en positivo de este colectivo. Esto significa que la simple prueba del cumplimiento de las condiciones es suficiente para que el trabajador pueda reclamar tal condición ante los órganos jurisdiccionales del orden social, si la condición no es reconocida por la empresa.
Ésta fue una antigua reivindicación de UPTA España, ya que en la actualidad muchas empresas que hacen uso del trabajo de Trades no reconocen esta relación simplemente negándose a la firma del contrato escrito y los Juzgados de lo Social se han venido declarando incompetentes ante la inexistencia de dicho contrato. “Esto nos lleva a un círculo vicioso que profundiza en la desprotección de estos trabajadores y en el incumplimiento del espíritu de la Ley 20/2007 del Estatuto del Trabajo Autónomo”, explica Abad Sabarís.
Por otra parte, el descenso de los precios en el transporte también ha llevado a muchos autónomos a tener que abandonar la actividad, siendo obligados a trabajar por debajo del coste de explotación. “Hace tiempo, esta circunstancia se daba esporádicamente en algunas cargas, pero hoy en día es una actuación común entre los cargadores, lo que ha llevado a un número abultado de autónomos de transporte a dejar la profesión”, explica Eduardo Abad. La medida permitirá estabilizar estos contratos “y dar una mayor seguridad a los trabajadores y para el ejercicio de las acciones colectivas de sindicatos y asociaciones representativas”, aclara.
La Comunidad Valenciana es la Comunidad Autónoma que más efectivos del transporte pierde (400), seguido de la Comunidad de Madrid (337) y Cataluña (295), lo que supone el 72’11% del total de bajas netas nacionales. Sólo dos Comunidades Autónomas registran un crecimiento en este periodo y en este sector. Baleares, que en el primer semestre de 2013 ha sumado en 331 autónomos transportistas al RETA, y Andalucía, que ha crecido en 53.