Los alcaldes de A Coruña, Carlos Negreira, y de Arteixo, Carlos Calvelo, visitaron el martes Punta Langosteira acompañados por el presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, así como miembros del equipo directivo del organismo público y técnicos de la UTE Langosteira.
Enrique Losada recordó anunció la licitación a principios de 2012 de la primera fase del contradique, con un importe de 26,5 millones de euros y un plazo de ejecución de dos años.
Se prevé iniciar las obras a mediados del año para aprovechar la campaña de verano y de ese modo empezar con fuerza y rapidez una infraestructura cuya longitud total será de 1.350 metros, de los que se construirán un total de 450 en esta primera fase.
El alcalde de A Coruña destacó por su parte la importancia del inicio del proceso para construir el contradique, que permitirá ganar cien nuevas hectáreas a pie de muelle, que sumadas a las ya ejecutadas elevarán a un total de 250 hectáreas la superficie total, lo que permitirá generar un gran desarrollo comercial que redundará en nuevas oportunidades para el empleo.
También Enrique Losada se refirió a las grandes posibilidades de cara al desarrollo industrial y logístico para la zona. Con respecto al calendario de trabajo una vez entregada la primera fase, el presidente de la Autoridad Portuaria avanzó que se procederá a la adecuación de explanadas, la habilitación de redes de saneamiento y suministro, así como a la ejecución de los viales interiores que conectarán con las carreteras de acceso.
Mientras se inician esas actuaciones, en el puerto se están realizando todas las gestiones necesarias para empezar a recibir barcos en el segundo semestre de 2012. Enrique Losada anunció que el primer material que se descargará será siderúrgico, y operado por la empresa Celsa.
El presidente de la Autoridad Portuaria también recordó que continúan las negociaciones con Repsol para el traslado de la terminal petrolera y lamentó la actitud del sindicato CIG en lo referente al desmontaje de la grúa del puerto exterior, considerando fuera de lugar que se utilice un accidente mortal para satisfacer determinadas demandas.