El aeropuerto de Barcelona tiene un fuerte potencial como aeropuerto de origen o destino de pasajeros, según muestran los últimos datos sobre la demanda de tráfico aéreo que publica el Observatorio de Tráfico Aéreo de Barcelona. El informe, elaborado por Gestió i Promoció Aeroportuària (GPA), para la Cámara de Comercio de Barcelona, analiza trimestralmente los datos de tráfico aéreo de Barcelona, basándose en las fuentes de Aena, IATA, los sistemas de reserva de billetes y fuentes de información internacionales del sector de transporte aéreo.
En este último informe, las cifras sitúan al aeropuerto de Barcelona en la cuarta posición europea y en la veintidós posición mundial, por delante de ciudades como Frankfurt, Roma o Ámsterdam.
Aún así, el Aeropuerto todavía tiene muy poca conectividad (6,8%) debido sobre todo a la carencia de vuelos directos de larga distancia. Este es un hecho casi excepcional dentro del mapa de los aeropuertos con más de 25 millones de pasajeros en Europa.
Barcelona ha crecido un 6,5% en pasajeros respeto el 2009, por encima de los grandes hubs europeos, y sigue situándose entre los 10 primeros aeropuertos de Europa por tráfico total. Este crecimiento muestra la recuperación del Aeropuerto hasta valores similares al año 2007, su máximo histórico.
Hasta septiembre de 2010, la tendencia general del tráfico doméstico y europeo era disminuir la oferta de capacidad (asientos) e incrementar el número de pasajeros (demanda). Estas disminuciones de capacidad con incrementos del pasaje han contribuido a sanear algunas rutas que sufrían de sobrecapacidad (demasiados asientos ofertados). Aún así, la entrada de Ryanair ha invertido esta tendencia, poniendo un alto número de vuelos y asientos disponibles en el mercado. De hecho, el crecimiento de este tipo de tráfico doméstico y europeo se debe en parte a la entrada de esta compañía.
La entrada de Ryanair en algunas rutas de corto y medio radio ya operadas por otras aerolíneas podría suponer un problema de sobrecapacidad para los operadores de estas rutas. Compañías como Air Europa, Air Berlin, Spanair, Vueling u otras, podrían verse obligadas a disminuir frecuencias en estas rutas puesto que tendrían más competencia, lo cual provocaría una pérdida de posibilidades de conectividad en el aeropuerto de Barcelona. Este hecho es muy relevante dada la carencia de volumen de tráfico de conexión de este Aeropuerto. Otros aeropuertos, en los vuelos de largo recorrido, destinan políticas específicas para potenciar el pasaje de conexión.
Según AENA, el crecimiento del tráfico intercontinental del aeropuerto de Barcelona ha sido superior al de los mercados domésticos y europeo, llegando a 2,06 millones de pasajeros directos, lo que representa un 13% de crecimiento anual. Desde abril de 2010 se han visto crecimientos superiores a un 20% en la mayoría de los meses, tanto de pasajeros como de asientos.
Este hecho se debe especialmente a la incorporación de nuevos destinos intercontinentales como las Qatar Airways (Doha), Pakistán International Airlines (Chicago), Air Canada (Montreal y Toronto), Spanair (Bamako) y en 2011 continuará la tendencia con nuevas incorporaciones por peso importante en el mercado español intercontinental (13,9 millones de pasajeros), puesto que representa el 28,6% del total en itinerarios directos e indirectos.
Según IATA los ingresos de las compañías aéreas han aumentado el 2010, ayudando así a hacer frente al coste creciente del combustible que llega a niveles superiores a los 100 dólares (barril brent).
En el año 2010 el crecimiento del número de pasajeros fue de un 8,2%. Para el 2011 se prevé también un crecimiento positivo, aunque inferior al que hubo en 2010. El índice de confianza de IATA en el sector muestra un indicador positivo, pero con algunas incertidumbres de cara a los próximos 12 meses debido a algunas condiciones de la oferta-demanda del mercado y a la presión que puede tener el precio del combustible sobre los niveles de beneficio.