El Foro Económico Mundial ha publicado su “Informe Global de Competitividad 2010-2011” (The Glogal Competitiveness Report 2010-2011, World Economic Forum). El resultado para España no es positivo, dado que desciende nueve puestos frente al pasado año.
Cada año, el informe analiza los 12 pilares determinantes para la competitividad de una economía, entre ellos, el entorno institucional y macroeconómico, las infraestructuras, la educación, la eficiencia de los mercados y la innovación.
Los resultados permiten elaborar un Índice Global de Competitividad que compara la situación en 139 países. España ha sufrido una fuerte pérdida de competitividad a lo largo del último año. En el ranking de 2009-2010, la economía española se situaba en el puesto 33 y en la clasificación de 2010-2011 ha bajado hasta la posición 42.
El informe atribuye “en gran parte” el retroceso de España “a una valoración cada vez más negativa de los mercados laborales y financieros, así como del nivel de sofisticación de las empresas del país”, y subraya que “la mayor área de preocupación sigue siendo el altamente inflexible mercado de trabajo” y el desequilibrio presupuestario de las cuentas públicas. Lo más positivo son las infraestructuras y el tamaño del mercado español.
El informe ha puesto a España como ejemplo de los países que tienen un mercado laboral rígido, lo que ha incrementado «de forma dramática» sus dificultades para superar la crisis económica. Además, destaca que los mercados laborales han de disponer de la flexibilidad, permitiendo el cambio de actividad de los trabajadores y las fluctuaciones salariales, sin grandes perturbaciones.
Pero, no todo son valores negativos para España. La cumbre ha puesto de manifiesto que la competitividad se ha visto impulsada por el amplio mercado disponible para las empresas nacionales, situando a nuestro país en el puesto 13 por dimensión de mercado. También ha reconocido el esfuerzo realizado en materia de inversión de infraestructuras, así como la adaptación tecnológica, que nos sitúa en el número 30 en el ranking de preparación tecnológica.
Por segundo año consecutivo, el primer lugar lo encabeza Suiza, mientras que Suecia avanza al segundo puesto, desbancando a Singapur, en tercer puesto y a los Estados Unidos, relegados al cuarto lugar. Alemania progresa y pasa al quinto puesto en el escalafón. A continuación, figuran Japón, Finlandia, los Países Bajos, Dinamarca y Canadá.
Por su parte, Reino Unido, Francia, Austria, Bélgica y Luxemburgo aparecen entre los veinte primeros países más competitivos del mundo. Irlanda ha retrocedido al puesto 29, mientras que Estonia avanza hasta el puesto 33.
De la misma manera, República Checa, con el puesto 36, Polonia con el 39 y Chipre con el 40 son, junto con Estonia, los países mejor situados entre los nuevos miembros de la UE, destacando el considerable progreso polaco y chipriota. El país peor situado de la Unión Europea de los 27, es Grecia, que ocupa el puesto 83.