“Las empresas que han entrado en el sector han contribuido a la modernización de los puertos y a aumentar su volumen de negocio”
¿Qué papel juega y qué funciones desarrolla actualmente un Agente Marítimo o Consignatario en el marco del transporte marítimo internacional?
El agente marítimo ha jugado y continúa jugando un importante papel tanto en la esfera Tramp como en la esfera Liner.
Y es importante decir que, hoy en día es aún mucho más complicado iniciar la actividad de agente, esencialmente por las cuantiosas inversiones que se requieren, sobre todo en tecnología, porque los Armadores exigen al agente eficientes conexiones informáticas y sistemas que permitan la información en tiempo real.
Existe la tendencia a la desaparición de pequeñas y medianas empresas consignatarias debido a la implantación, por parte de navieras y armadores, de agencias propias. ¿Esta tendencia continuará o, por contra, el mercado empieza a estabilizarse?
El mercado está en permanente evolución. El ámbito o sector de las agencias marítimas es actualmente muy distinta a la de hace quince años; y dentro de diez años será también diferente.
Los márgenes decrecen progresivamente y, por tanto, no hay más remedio que crecer en tamaño. Un análisis de lo que ha ocurrido en Alemania, Holanda, Bélgica, Reino Unido, Francia e Italia nos da una idea muy clara de cuál es la realidad hoy en día y de cómo será el futuro inmediato. Año tras año iremos viendo cómo van evolucionando las agencias marítimas y cómo van diversificando los negocios.
¿Cómo debe valorarse la entrada de grandes grupos empresariales, algunos vinculados, por ejemplo, a la construcción de infraestructuras, en el sector marítimo-portuario?
Aunque sé que no todo el mundo piensa lo mismo, por mi parte lo veo positivo. No debemos olvidar que el sistema portuario español estaba bastante anticuado, y de eso no hace demasiados años.
Las empresas que han entrado en el sector han contribuido sin duda a la modernización de los puertos, circunstancia que también ha permitido un mayor volumen de negocio. El “Estado protector” no hubiera podido asumir por si solo esa modernización de la que hoy nos congratulamos.
¿Cómo afecta la constante oscilación de los fletes, últimamente a la baja, a una compañía consignataria?
En realidad lo que más afecta a una agencia marítima o a un empresa consignataria es la segregación del BAF del importe total del flete, pues los armadores no consideran que el BAF sea “comisionable”.
ANESCO es la patronal en España de las Empresas Estibadoras y de los Consignatarios de Buques. ¿Qué temas se discuten en el seno de ANESCO que atañan a los Consignatarios a nivel nacional?
Realmente existen bastantes temas de discusión, como la Ley de puertos, la Ley de Navegación y las últimas sentencias del Tribunal Supremo sobre la responsabilidad del agente marítimo.
De entre estos, es muy importante para el colectivo de consignatarias lo que atañe a la Ley de Navegación, que se encuentra varada por falta de acuerdo político. Esta Ley nos afecta particularmente porque en su articulado equipara al agente marítimo con el armador; y es insostenible afirmar, como lo hace el Tribunal Supremo, que un agente es igual a un armador.
¿Cree que la figura del Agente Consignatario está jurídicamente bien defendida en materia de responsabilidad frente a otras partes implicadas en la cadena marítimo-logística?
El agente consignatario es un agente y como tal no se le puede hacer responsable de las actividades de su principal, sino sólo de su propia actividad. Otros agentes que participan en la cadena marítimo-logística, como por ejemplo los transitarios, tampoco son responsables cuando actúan en nombre de un principal. Otra cuestión sería cuando actúa como porteador.