El viernes 23 de febrero, unos 200 profesionales de la comunidad logística de Barcelona se congregaron en la 11ª edición de la Calçotada organizada por el Club del Transitario Marítimo.
Durante el encuentro el Secretario del Club del Trasitario Marítimo, Josep Bertran, –que ejerció de anfitrión al no poder asistir al encuentro por “compromisos ineludibles de trabajo” el Presidente del CTM, Jaume Altisent– señaló que el Club del Transitario Marítimo “no es una agrupación de empresas, sino de personas, de amigos que son transitarios y que están vinculados a empresas transitarias”. En su reunión mensual, los miembros del CTM “intercambiamos impresiones sobre los problemas del sector, aprendemos unos de otros y recibimos de los invitados que tenemos en nuestros encuentros información que es útil para las empresas”.
Respecto a la Calçotada, un encuentro que reúne desde hace 11 años a multitud de profesionales del sector logístico, Bertran indicó que el beneficio que genera es “la satisfacción de contribuir a mejorar las relaciones entre las personas que trabajan en el mismo medio” y también “satisfacción porque facilitamos el intercambio personal entre personas que no han tenido la oportunidad de hacerlo” y, aunque sólo sea una vez al año, “nos encontramos, hablamos y nos vemos con aquellas personas que nos hace ilusión volver a ver”, y añadió que “es más fácil resolver un problema profesional con quien has compartido unos calçots que con quien no conoces de nada”.
A continuación se refirió a la actividad en el sector para hacer hincapié en “la perplejidad” que causa el hecho que todavía “no se haya resuelto el escándalo de las colas de los transportistas que van a recoger o entregar contenedores al puerto”. Para el Secretario del CTM, “verlo, hace sufrir” y añadió que “debe ser realmente difícil de solucionar” porque “estamos seguros que toda la comunidad portuaria es consciente del mal que se está haciendo a los transportistas y del trato degradante que reciben”.
Por otro lado, también habló sobre los Representantes Aduaneros, poniendo de manifiesto que “continuamos sin entender que no se haya dado la vuelta todavía a la cuestión de la responsabilidad” de éstos. Según Bertran “nos consta que las organizaciones de representación están haciendo esfuerzos loables ante la Administración”. Por ello, “la argumentación apoyando el cambio es sólida y el esfuerzo que se está haciendo es encomiable, pero el cambio no llega; ¿por qué?”.
Y antes de pasar la palabra al Presidente del Port de Barcelona, Sixte Cambra, tuvo unas palabras hacia él mencionado –respecto a que ha puesto su cargo a disposición del próximo Gobierno catalán– que “si su continuidad en el cargo dependiera de unas elecciones, las ganaría de calle”. Y no solamente por “los excelentes resultados económicos” del Port de Barcelona “en estos últimos tiempos revueltos”, sino por “el talante de orden y eficacia que, a pesar de todo, ha imprimido al Port”.
A continuación intervino Sixte Cambra que agradeció al Club del Transitario Marítimo la organización a lo largo de estos 11 años de la Calçotada, una iniciativa que “permite el reencuentro de muchas personas que trabajan en el mismo sector». Para Cambra, “este acto lúdico es muy importante para la cohesión y la buena relación en la comunidad, y fundamental para la actividad global vinculada al Port de Barcelona”.
En esta 11ª edición de la Calçotada, el Club del Transitario Marítimo quiso agradecer a los sponsors y patrocinadores su colaboración, entregando a cada uno de ellos un pequeño presente: una botella de “Ron prohibido”, que se llama así porque fue prohibido por el rey Felipe V para proteger a los fabricantes nacionales de este licor, en detrimento de los que lo elaboraban en las colonias. La historia cuenta que, en el siglo XVIII, este ron venia de México en barricas que antes habían servido para el transporte de Jerez desde la península a las colonias. Durante el trayecto, el alcohol de caña mejoraba de tal manera que consiguió anular al ron que se hacía aquí; por ello se prohibió su importación.
La 11ª Calçotada de CTM ha estado patrocinada por: el Port de Barcelona, el Air Cargo Club, Barcelona Container Depot Services, Brosa Abogados y Economistas, Bytemaster Servicios Informáticos, Cosco Shipping, Grupo Embalex, Grupo Mestre, Grupo Romeu, Hamburg Sud, Hapag Lloyd Spain, Hutchison Ports BEST, IFS International Forwarding, Jori Armengol & Associats, Juma Asesoría Empresarial, K Line España Servicios Marítimos, Marmedsa (Noatum Maritime), Mediterranean Shipping Company, SC Trade Technologies, Terminal Port Nou, Vanguard Logistics Services, Wallenius Wilhelmsen Logistcis y ZIM Global Reach Local Touch.