La Cámara de Comercio de Barcelona constata que septiembre ha sido un mes clave para el transporte ferroviario de mercancías en el Corredor del Mediterráneo.
Por un lado, el pasado día 15 se cerró la exposición pública del documento de trabajo de la Comisión Europea sobre los criterios para la definición de nueva Red Transeuropea de Transportes (TEN-T en su acrónimo inglés).
La Cámara de Comercio de Barcelona ha participado activamente en este importante proceso desde su inicio (febrero de 2009), exigiendo que prevalezcan los criterios que tendrán que garantizar la plena presencia del Corredor del Mediterráneo con carácter prioritario en la futura TEN-T
Las propuestas hechas por la Comisión Europea durante este proceso indican un claro cambio de orientación de la política de transportes europea, en la cual encaja plenamente el Corredor del Mediterráneo.
Pero para que ello acabe siendo una realidad, “hará falta que el Gobierno estatal apoye firmemente el Corredor del Mediterráneo, muy especialmente en el desarrollo del nuevo Plan estratégico para el impulso del transporte ferroviario de mercancías en España, que el Ministro de Fomento presentó el pasado 14 de septiembre”, señala la entidad cameral en una nota hecha pública.
Este nuevo plan “representa un documento básico, de referencia, en el que se establecen las pautas a seguir de ahora en adelante para mejorar el sistema ferroviario estatal, y con un planteamiento de financiación, en principio, realista. Pero que implica, también, mucho trabajo por delante y mucho consenso, dado que hay aspectos concretos del Plan que requieren concreciones y mejoras, precisamente con relación al Corredor del Mediterráneo. Para la Cámara de Comercio, “Todo este proceso que ahora tenemos por el delante tendrá que ser liderado por el Ministerio de Fomento con la máxima celeridad y también manteniendo la misma voluntad de consenso con los que ha sacado adelante este plan.”
El Corredor Mediterráneo encaja en la nueva Red Transeuropea de Transportes
La Cámara de Comercio de Barcelona ha participado activamente en las consultas públicas de la Comisión Europea para sentar las bases de planificación de la nueva TEN-T. Y lo ha hecho persiguiendo un objetivo fundamental: la inclusión del Corredor del Mediterráneo, principalmente en cuanto a transporte de mercancías se refiere, dentro de la Red Central con la máxima prioridad.
En la última fase de consulta que se cerró el pasado día 15 de septiembre, la Cámara ha hecho una valoración positiva de las propuestas generales de la Comisión Europea, dado que el Corredor del Mediterráneo encaja plenamente en la Red.
En primer lugar, la Comisión Europea quiere una red de transportes que posicione a la UE en la economía y el comercio mundial. Y en este ámbito, el Mediterráneo juega un papel fundamental, no sólo como mercado potencial por sí mismo, sino también como vía de entrada de las mercancías que, procedentes de Asia, se dirigen hacia los mercados del centro de Europa, ofreciendo rutas más cortas que las actualmente se utilizan hacia los puertos del Norte de Europa, lo cual representa menos emisiones de gases de efecto invernadero.
Por otra parte, la Comisión Europea considera básico que los puertos y aeropuertos intercontinentales que conectan la UE con terceros países, y también las principales áreas de actividad económica e industrial y las centrales logísticas, han de constituirse en nodos claves de la Red Central de transportes (o sea, aquélla sobre la cual se definirán los proyectos prioritarios).
El Corredor del Mediterráneo es un eje ejemplar, dado que, a lo largo de todo su trazado, conecta toda una serie de nodos de transporte y actividad económica fundamentales (puertos, aeropuertos y zonas logísticas) que concentran una parte importante de las operaciones de importación y exportación estatales.
Otro criterio clave propuesto por la Comisión Europea para la selección y priorización de proyectos es el de la eficiencia. Una de las consecuencias de este criterio es que puede resultar preferible completar, mejorar o aprovechar ejes de infraestructura de transportes ya existentes, en lugar de desarrollar ejes “alternativos”, pero completamente nuevos y más costosos.
Finalmente, otro criterio propuesto por la Comisión, y valorado muy positivamente por la Cámara, es el de la búsqueda del valor añadido en los proyectos a emprender. No sólo bajo el punto de vista del retorno de la inversión, sino también del potencial de la infraestructura para impulsar la economía del territorio.
El Corredor del Mediterráneo ofrece un elevado potencial de rentabilidad socio-económica, debido a la relevancia de los nodos de actividad que comunica, y a la alta demanda de tránsito que ya representa en la actualidad. Todos aquellos proyectos que contribuyan a la racionalización de los tráficos en este Corredor, y su consolidación como gran eje de comunicación del Mediterráneo Europeo y de la UE con el Norte de África y Asia, encajan plenamente con éste criterio de la Comisión Europea.
En definitiva, nos encontramos delante de un nuevo marco europeo de planificación de las infraestructuras de transportes, que facilitará el encaje del Corredor del Mediterráneo dentro de una nueva lista de proyectos prioritarios. Aunque, para que se cumpla ésta predicción, resulta imprescindible la plena complicidad del Gobierno Central, muy especialmente a través del desarrollo del nuevo Plan estratégico para el impulso del transporte ferroviario de mercancías en España.
Concreciones sobre el Plan ferroviario del Ministerio de Fomento
La Cámara de Comercio de Barcelona valora positivamente el nuevo Plan ferroviario “porque se plantea en el marco de un proceso de concertación con el sector y con las comunidades Autónomas, por un lado, y porque propone un amplio abanico de actuaciones largamente demandadas por el mundo empresarial y hasta ahora muy poco tenidas en cuenta desde las Administraciones, o como mínimo, no recogidas hasta ahora en un único documento de planificación.”
Pero la entidad cameral también hace ciertas concreciones sobre el diseño del Corredor que deben ser tenidas en cuenta por el Ministerio de Fomento.
Por un lado, en lo que concierne específicamente al Corredor del Mediterráneo, éste se dibuja en el esquema propuesto para la Red Básica ferroviaria de mercancías, aunque sólo a partir de Almería, hasta la frontera francesa. El tramo de conexión que falta entre Algeciras y Almería, pieza fundamental del corredor dado que representa la salida de las mercancías del Puerto de Algeciras, se hace constar con una línea de puntos, en calidad de “corredor en estudio”. Es imprescindible asegurar la presencia de este tramo de Corredor en la Red Básica, dar por seguro de que es una parte integrante del mismo, y no una línea de puntos sin ningún efecto a nivel de definición de proyectos.
Por otra parte, el plan contempla el establecimiento de corredores completos y eficientes para las mercancías, aprovechando la entrada en servicio de nuevas infraestructuras de alta velocidad, como el Madrid-Valencia, el Barcelona-frontera francesa o el Eje Atlántico. Esto representa una perspectiva muy positiva para el Puerto de Barcelona.
Pero esta perspectiva hacia una plataforma ferroviaria eficiente para las mercancías tendría que extenderse a todo el Corredor, o como mínimo, hasta los puertos de Tarragona (la nueva plataforma entre Castellbisbal y Tarragona, que demanda el Gobierno de la Generalitat), Castellón (mediante la ampliación del corredor Tarragona-Castellón, actualmente en estudio por parte del Ministerio de Fomento) y Valencia (aprovechando el ramal Valencia-Castellón de la línea de Alta Velocidad Madrid-Valencia).
En síntesis, el nuevo Plano del Ministerio para el transporte ferroviario de mercancías requiere aún mejoras y concreciones importantes en lo que concierne al Corredor del Mediterráneo, entendido como un eje de repercusión peninsular y Europea.