La Fundació CIM-UPC de la Universitat Politècnica de Catalunya · BarcelonaTech (UPC), entidad sin ánimo de lucro y que tiene como misión institucional conectar la universidad con el tejido industrial y social a través de la ingeniería, presenta su nuevo Postgrado en Competencias Directivas.
Actualmente, las organizaciones se encuentran inmersas en una situación de incertidumbre, fruto de un entorno sometido a un cambio constante. Este cambio genera necesidades diferentes, una nueva realidad en la que las organizaciones tienen que adaptarse hábilmente, pues disponen de poco tiempo de reacción. Para garantizar la continuidad de las industrias, los profesionales que lideran equipos deben de poder generar confianza e inspirar nuevas estrategias que se traduzcan en ventajas competitivas al mercado. Las competencias directivas son imprescindibles para aquellos que han de liderar equipos responsables de procesos productivos, ya que, no sólo tendrán que saber gestionar procesos, sino que deben motivar e implicar a las personas que forman parte de sus equipos. Esto pasa por desarrollar su capacidad comunicativa (presencialmente o a través de videoconferencias) aplicada a dirigir un equipo de trabajo (quizás multicultural), resolver conflictos, motivar y, sobre todo, saber escuchar. Las personas que lideran equipos deben de tener la capacidad de cambiar y de hacer cambiar la forma de entender la realidad actual, complementando el conocimiento propio de las ingenierías con competencias que les ayuden a entender y transmitir un nuevo concepto de gestión empresarial basado en las personas, donde el liderazgo adecuado de un equipo sea la base para hacer crecer el valor de una organización y posicionarla.
El curso Postgrado en Competencias Directivas pretende dotar a los participantes de métodos y habilidades que les permitan afrontar con éxito los retos del liderazgo en el entorno empresarial actual, especialmente en plantas de producción, ya que, dado el carácter técnico de la actividad, cada vez es más evidente la necesidad de equilibrar la parte tecnológica y humana, la operativa y la relacional. Por ello, hace falta que los participantes desarrollen al máximo su capacidad comunicativa y puedan transformar su rol de dirección hacia un liderazgo real que les permita:
- Liderar equipos de alto rendimiento, creando vínculos funcionales y relacionales con las personas que integran la organización y potenciando al máximo los flujos de comunicación entre ellas para generar talento y conocimiento de pertenencia a la organización.
- Reconocer y tratar los diferentes perfiles humanos con eficacia, aprendiendo cómo pueden comunicarse con cada uno de ellos para motivarlos y comprometerse con los objetivos.
- Pensar estratégicamente, creando visiones de negocio inspiradoras e innovadoras.
- Mejorar el autoconocimieto personal, desarrollando sus puntos fuertes y gestionando las posibles carencias.
- Negociar con habilidad, con objetivos claros para llegar a acuerdos satisfactorios.