La Guardia Civil detuvo el pasado día 23, en la T-1 del aeropuerto de El Prat-Barcelona a un ciudadano español, de 37 años de edad vecino de Sabadell, como presunto autor de un delito contra la salud pública, al ser detectado a su llegada a Barcelona con bolas de cocaína en el interior de su organismo.
Esta persona, regresaba a Barcelona procedente de Punta Cana (República Dominicana). En el interior de su equipaje facturado la guardia civil descubrió dos bolas de cocaína –iguales a las que se transportan en el interior del organismo y que pudo haber expulsado antes de su llegada a Barcelona-, por lo qué se procedió a la realización de una placa radiológica con el objetivo de confirmar la posible existencia de otras bolas ocultas en su cuerpo.
Tras confirmarse esta sospecha -al determinar la placa la existencia de gran cantidad de elementos extraños en el organismo- la persona detenida fue conducida a un centro hospitalario para que el proceso de evacuación se produjese bajo observancia médica.
La actuación de la guardia civil permitió la incautación de un total de 956 gramos de droga.
340.000 euros ocultos en un bote de cacao en polvo y en paquetes de toallitas
Otra de las incautaciones importantes se produjo el 5 de julio, fecha en que la Guardia Civil y la Agencia Tributaria intervinieron en la terminal T-1 del aeropuerto Barcelona-El Prat, 340.748 euros, en efectivo, que portaban dos mujeres, madre e hija, de nacionalidad china y que pretendían viajar a ese país asiático.
Al pasar estas viajeras por el control de seguridad de la terminal, agentes de la O.D.A.I.S.A. (Oficina de Análisis e Investigación de Seguridad Aeroportuaria) de la Guardia Civil y Funcionarios del Servicio de Viajeros de la Aduana, descubrieron que la hija transportaba 37.313 euros escondidos en su vestimenta.
Dentro de la maleta de la madre, apareció un bote de cacao en polvo, de una conocida marca comercial, precintado y simulando contener el producto original, y varios paquetes de toallitas de varios colores.
En el bote, una vez destapado, retirado el precinto y vacío de cacao, aparecieron varios fajos de billetes, llegando a contabilizarse otros 30.000 euros.
En los paquetes, las toallitas servían de pantalla para esconder el resto del dinero, más de 273.435 euros, en el fondo de los embalajes.
En todos los casos se instruyeron actas por infracción económica administrativa al no haber sido declarado el montante económico con el que pretendía viajar fuera de España.
Nuevo método de ocultación de droga en el aeropuerto
Agentes de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (ODAIFI) de la Guardia Civil del aeropuerto internacional Barcelona-El Prat, se incautaron en junio, en la terminal T1, de 3.868 gramos de cocaína y procedieron a la detención de una ciudadana española de 46 años y vecina de Barcelona, como presunta autora de un delito contra la salud pública.
En el marco de las misiones de la Guardia Civil en el aeropuerto de Barcelona, entre otras el control fiscal de pasajeros y mercancías, inteligencia y análisis de riesgo, procedieron a interceptar a esta persona, que realizaba el trayecto entre Bogotá (Colombia) y Barcelona, a la que se le practicó una minuciosa inspección, interviniendo las botellas y las nueces en su equipaje facturado
La cocaína oculta en las nueces había sido alojada en el interior de los frutos tras vaciar su contenido natural. Una vez camuflada la droga, unos seis gramos por cada pieza, las dos cáscaras de la nuez habían sido pegadas para aparentar que se trataba de un producto original sin manipular.
Las dos bolsas de “frutos secos” intervenidas contenían un total de 111 unidades, que tras su vaciado arrojaron un peso en contenido de droga de 1.618 gramos.
Las tres botellas de vino, de 750 ml cada una, con las que viajaba, se encontraban completamente llenas de cocaína líquida.
Dos detenidos en el puerto de Barcelona con más de 400 kilos de hachís
Por otro lado, a principios de julio, la Guardia Civil detuvo en el puerto de Barcelona a un hombre de origen marroquí de 39 años de edad y vecino de Valmojado (Toledo) y a su acompañante, una mujer de 38 años de la misma nacionalidad y vecina de Ceuta, como presuntos autores de un delito contra la salud pública.
Agentes de la Guardia Civil del puerto de Barcelona se encontraban realizando el control fiscal de desembarque de los pasajeros del barco que cubre la línea regular Tánger-Barcelona-Génova. Al acceder al control un vehículo y ante la sospecha de que pudiera alojar oculta algún tipo de droga, se procedió a una revisión exhaustiva del mismo.
Una vez finalizada ésta y en varios compartimentos y dobles fondos situados en puertas, techo, asientos, parte trasera, guantera e incluso en el motor, los agentes descubrieron que transportaba 482,190 kilogramos de hachís, dispuestos en 632 paquetes de unos 750 grs. cada uno.