La implementación de las medidas contempladas en un plan para disminuir la contaminación que se origina en el puerto de Barcelona podría llegar a reducir las emisiones de los principales contaminantes que afectan el área metropolitana en un 12%. Esta es la principal conclusión del Plan APICE, de mitigación de emisiones marítimas y portuarias para la mejora de la calidad del aire, financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional-Mediterráneo (Programa MED), y en el que ha participado el Departament de Territori i Sostenibilitat. El proyecto ha sido implementado por el Centro Mediterráneo EUCC y el CSIC-IDAEA. Cuatro ciudades mediterráneas más, Marsella, Génova, Venecia y Tesalónica, participan en el proyecto.
Según el estudio, la medida que más beneficiaría la calidad del aire sería el desarrollo del gas natural licuado (GNL) como combustible para el tráfico marítimo y para los camiones que transitan por el recinto portuario. Este combustible ofrece perspectivas de reducción de alrededor del 90% de los óxidos de nitrógeno (NOx). Precisamente el NOx es uno de los principales contaminantes del área metropolitana de Barcelona, junto con el material particulado (PM10). Se calcula que la contribución del puerto a esta contaminación es de un 23% de las PM10 y de un 16% de los NOx. La Direcció General de Qualitat Ambiental, del Departament de Territori i Sostenibilitat, está manteniendo reuniones con Sedigas, Gas Natural, Ros Roca y el Grupo Ham para analizar los puntos fuertes y debilidades de esta oportunidad.
Para la promoción del GNL sería necesaria la implementación de la infraestructura logística para el suministro y un desarrollo de la normativa para embarcaciones propulsadas con este combustible.
Otras medidas contempladas en el Plan APICE hacen referencia al control de las emisiones a bordo de los buques, al suministro eléctrico a barcos atracados, a los movimientos de la flota interna del puerto, al tráfico de camiones y de trenes, a la maquinaria de manipulación de mercancías y de graneles sólidos, y a las obras.
Gracias al Plan APICE, la Generalitat cuenta con una información más detallada de las emisiones portuarias y de las acciones más adecuadas para mitigarlas. Estas medidas, junto con las recogidas en el Plan de actuación para la mejora de la calidad del aire 2011-2015, pueden ser claves para reducir la contaminación en el área metropolitana de Barcelona.