La naviera japonesa Nippon Yusen Kaisha (NYK) reducirá su flota de portacontenedores a la mitad y su capacidad de transporte aproximadamente en un 30% hasta 2015, y favorecerá fletamentos a corto plazo para controlar mejor los costes y la rentabilidad.
Así lo puso de manifiesto el presidente de la compañía, Yasumi Kudo, el pasado 4 de enero, durante su discurso de año nuevo. También confirmó que este grupo está estudiando cómo fusionar sus filiales NYK Logistics y Yusen Air and Sea Service.
En enero de 2009, NYK tenía una flota de 115 portacontenedores, con capacidad para 410.000 TEUs; en enero de 2010 esta cifra se ha visto reducía a 90 buques con capacidad para 360.000 TEUs. Yasumi Kudo también recordó que NYK ya ha reducido su flota de car carriers de 130 a 90 buques, debido a que la exportación de coches de Japón descendió un 50% en 2009.
Por otro lado, durante los próximos años, NYK tiene previsto recibir unos 40 portacontenedores de nueva construcción. A pesar de estas nuevas incorporaciones, el presidente de NYK afirmó que en conjunto el número de buques de la compañía “se reducirá hasta la mitad y su capacidad total de transporte, en un tercio, hasta 2015”. Para alcanzar este objetivo, la naviera devolverá a sus armadores los buques fletados en los casos en que sea posible y desguazará o venderá los buques propios más antiguos.
El máximo responsable de la naviera también manifestó que, a pesar de que estas medidas ya han contribuido a reducir los costes, no son suficientes para restaurar la rentabilidad. “Es necesario que suban los fletes a niveles apropiados, tras el desplome que han venido sufriendo”.
