Según informa la propia naviera, Safmarine, perteneciente al grupo AP Moller, ha interrumpido el servicio en el puerto de Tánger, reemplazando este puerto por los de Algeciras y Málaga, debido a los “insatisfactorios” niveles de servicio del puerto marroquí.
Asimismo, las repetidas disfunciones en el servicio y la falta de garantías de mejora en las operaciones han llevado a Safmarine tomar esta decisión.
La naviera ha decidido “recolocar nuestro negocio futuro en el puerto de Algeciras, utilizando las terminales de APM y Hanjin, y en el puerto de Málaga, en donde hay una elevada eficiencia y gran estabilidad”, señalan desde Safmarine