El Port de Barcelona ha presentado su Plan de Mejora de la Calidad del Aire, un plan pionero que tiene como objetivo reducir de manera efectiva las emisiones contaminantes de la actividad portuaria. El documento, aprobado por el Consejo de Administración del Port y presentado a la Mesa de Calidad del Aire de la Conurbación de Barcelona, consta de 25 acciones desarrolladas en 53 actuaciones.
El presidente del Port de Barcelona, Sixte Cambra; el director general, José Alberto Carbonell; y el jefe de Medio Ambiente de la entidad, Jordi Vila, han expuesto las principales directrices d este Plan, que tiene como acciones más representativas la promoción del gas natural licuado como combustible alternativo de movilidad para barcos y para camiones de transporte de mercancías, una ambiciosa política de bonificaciones para los barcos más limpios y la renovación de la flota interna del puerto con vehículos eléctricos.
Según ha puesto de manifiesto Sixte Cambra, “durante las últimas dos décadas hemos sido un puerto pionero en materia ambiental y tenemos la firme voluntad de seguir siendo líderes. Somos conscientes de que nuestra responsabilidad como empresa pública es liderar el cambio hacia un modelo más sostenible».
Según las modelizaciones realizadas por Barcelona Regional, la actividad portuaria es responsable del 7,6% de la concentración media anual de NOx en la ciudad de Barcelona y del 1,5% con respecto a las partículas en suspensión.
El director general del Port, José Alberto Carbonell ha concretado cómo se reparte esta contribución entre los principales segmentos de actividad de la instalación. Así, los portacontenedores son responsables del 1,7% de la concentración media anual de NOx de la capital catalana, el resto de barcos de carga representan el 2%, los ferrys el 1,4% y los cruceros del 1,2%.
Del total de las 5.116 de toneladas/año de emisiones generadas por la actividad portuaria, los buques de carga generan 1.804,9 tn/año, seguido por los portacontenedores con 1.554,1 tn/año, los cruceros (693,2 tn/año), los ferrys (686,8 tn/año), otros buques (377 tn/año) y finalmente los barcos auxiliares, con 234,8 tn/año. La circulación de vehículos en el recinto portuario genera 114,4 tn/año y la maquinaria auxiliar 80,6 tn/año.
En el caso de las partículas en suspensión, la contribución de la actividad portuaria a la concentración total de la ciudad (estimada en un 1,5%), se divide en el 0,38% de los portacontenedores (148,6 tn/año), el 0,48% de otros buques de carga (182,75 tn/año), el 0,23% de los cruceros (62,40 tn/año) y el 0,28% de los ferrys (70,33 tn/año), entre otros.
Por su parte, Jordi Vila ha explicado el funcionamiento de la red de vigilancia de la calidad del aire desplegada en el recinto portuario que incluye, por ejemplo, 8 estaciones meteorológicas automáticas, 5 captadores de partículas en suspensión y 3 estaciones automáticas de calidad del aire, todas ellas repartidas por distintos muelles, terminales y zonas en las que se desarrolla actividad, como la ZAL.
También se ha referido a los numerosos estudios realizados por otras entidades, como la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), que ha analizado el régimen de funcionamiento de los motores de 15 cruceros, barcos que representan el 60% de las escalas anuales en el puerto de este tipo de buque.así como también de 15 ferrys.
Otros estudios también han valorado la caracterización de emisiones de 26 barcos mercantes a partir de visitas y datos reales de potencia.
Un puerto líder en materia ambiental
Desde el año 1996 el Puerto de Barcelona ha sido pionero en el impulso de actuaciones para reducir el impacto ambiental de la actividad que se desarrolla en la instalación, como la potenciación del ferrocarril y el short sea shipping (SSS), el control ambiental de todas las obras promovidas por el Port, la creación de una red de vigilancia de la calidad del aire del entorno portuario (la primera y más completa de todo el sistema portuario español), la regulación de la manipulación de los sólidos a granel y el seguimiento de las emisiones a la atmósfera de las diferentes concesiones.
El Plan de Mejora de la Calidad del Aire del Port de Barcelona se enmarca en dos planes de alcance superior elaborados por la Generalitat (Plan de mejora de la Calidad del Aire de la Región Metropolitana desde 2015 hasta 2020) y por el Ayuntamiento de Barcelona (Plan de Mejora de la Calidad del Aire de Barcelona 2015 a 2018). El documento plantea un amplio abanico de ámbitos de actuación: reducción de las emisiones de barcos, de tráfico, de maquinaria de terminal, de obras portuarias y de sólidos a granel; potenciación del modo ferroviario y el short sea shipping; nuevos accesos, movilidad sostenible y red de la calidad del aire.
GNL como combustible de movilidad
La promoción del gas natural licuado (GNL) como combustible alternativo para barcos, maquinaria de terminal y camiones es una de las acciones más destacadas del plan, ya que el GNL reduce un 80% las emisiones de NOx y suprime las emisiones de partículas sólidas en suspensión y de óxidos de azufre. Además, las nuevas legislaciones sobre emisiones de gases contaminantes son cada vez más restrictivas y la industria marítima está apostando por el GNL como combustible de propulsión de un número creciente de buques que entrarán en servicio en los próximos años.
Esta acción se compone de diferentes actuaciones encaminadas a promocionar el GNL como combustible alternativo para barcos y camiones, orientadas a dotar al Port de Barcelona de infraestructuras de suministro de GNL y desarrollar pilotos y proyectos demostrativos. Para el caso de los barcos, la infraestructura que necesita el Port para hacer posible el suministro de GNL consiste en la instalación de un brazo de carga criogénico y flexible en la terminal de Enagás para suministrar GNL en gabarra y pequeños barcos y la adaptación de una gabarra para suministrar GNL a buques. Ambas iniciativas están en marcha y cuentan con financiación europea, ya que son parte del proyecto CORE LNGas hive promovido por la Unión Europea.
Entre los proyectos piloto destacan la incorporación de un motor auxiliar de gas en el ferry Abel Matutes, de Baleària, y la construcción de un generador de gas en el muelle para sustituir los motores auxiliares de buques ro-ro y proveerlos de energía eléctrica desde tierra. También se realizarán pruebas para transformar dos straddle-carriers de propulsión diesel a GNL, de manera que se puedan analizar sus rendimientos, eficiencia y nivel de emisiones. El piloto se desarrollará tanto en la terminal BEST (Hutchison) como APM Terminals (antes TCB) y, si los resultados son satisfactorios, se renovará progresivamente la flota de straddle-carriers de ambas instalaciones.
Petición para poder bonificar a los barcos más limpios hasta un 40%
La política de bonificaciones ambientales sobre la tasa al buque es uno de los aspectos más innovadores del plan. «La bonificación -descuento sobre la tasa Portuaria- es una herramienta muy importante, ya que es un instrumento fundamental para incidir en los barcos,», ha subrayado el director general, José Alberto Carbonell. El problema es que actualmente la ley sólo permite bonificar por razones medioambientales un máximo del 5% sobre la tasa al buque, un margen muy reducido para construir una estrategia ambiental ambiciosa.
Por ello, «el Port de Barcelona solicitará al Ministerio de Fomento la modificación de la Ley de Puertos para poder implantar bonificaciones ambientales de hasta un 40% de la tasa al buque, como ya hacen puertos del norte de Europa (Rotterdam, Hamburgo y Amberes)», ha indicado Carbonell. Con la nueva normativa, el Port de Barcelona pretende atraer de manera más efectiva los ferrys, cruceros y buques de carga más limpios.
«El Port también ejerce desde hace años su influencia desde diversos organismos internacionales de los que forma parte para instar a la Organización Marítima Internacional (OMI) que sea más ambiciosa en la regulación de las emisiones a barcos», ha añadido el presidente, Sixte Cambra.
La renovación integral de la flota interna de vehículos del Port por unidades eléctricas es otra de las acciones del Plan de Mejora de la Calidad del Aire de la entidad. El objetivo es que el 100% de la flota sea eléctrica para el horizonte 2020. Esta medida irá acompañada del despliegue de la infraestructura de conexión eléctrica en los estacionamientos, parkings y espacios públicos del recinto portuario. Como administración pública desde el Port de Barcelona se considera que se debe ser líder en aquellas medidas que pueden ser seguidas por otras organizaciones de la comunidad portuaria.