El Consorci de la Zona Franca de Barcelona y Celmar, empresa dedicada a la logística y el transporte, han inaugurado hoy 9 de diciembre el nuevo almacén de productos químicos de la Zona Franca de Barcelona, denominado Nave ADR.
En el acto de inauguración, el delegado del Estado en el Consorci de la Zona Franca de Barcelona, Manuel Royes, ha destacado que “este almacén cuenta con todas las homologaciones” pertinentes para el manejo y almacenamiento de mercancías peligrosas, además de ser “el único en Barcelona puesto en servicio para toda el área metropolitana y Catalunya”.
Por su parte, Marcos Pozo, Administrador de la compañía Celmar, ha señalado que “este es un proyecto llevado a cabo con mucho esfuerzo y que ahora ponemos a disposición de clientes, empresas transitarias y operadores logísticos que requieran servicios de manipulación y almacenaje de mercancías peligrosas”.
La nave ADR, que recibe el nombre ADR por el acuerdo europeo Agreement Concerning the International Carriage of Dangerous Goods by Road, es una infraestructura básica para la seguridad industrial que tiene como finalidad almacenar productos químicos peligrosos que utilicen industrias de toda Catalunya. Se trata de un depósito altamente especializado que ha incorporado las últimas normativas de reglamentación europea sobre manipulación y almacenaje de productos químicos.
En la construcción de esta infraestructura, ubicada dentro del recinto de la Zona Franca Aduanera (en la calle 5 del polígono industrial) el Consorci ha invertido 1,1 millones de euros. El nuevo almacén sustituye al antiguo depósito ADR, más sencillo y de menor dimensión, que ha sido desmantelado por estar en terrenos afectados por el proyecto de construcción del nuevo centro penitenciario de Barcelona.
Más capacidad y especialización ADR
Por normativa, el centro está construido perimetralmente aislado dentro de una parcela de 2.000 m2, de manera que la superficie construida es de 800 m2 y tiene el doble de superficie de almacenaje que la antigua nave ADR.
Siguiendo todas las exigencias reglamentarias de la Normativa Contra Incendios en Establecimientos Industriales y en Almacenaje de Productos Químicos, la nueva nave levantada por la constructora VOPI 4 y diseñada por el despacho de ingeniería y arquitectura MG Ingenieros, tiene un aspecto particular debido a la especificidad de sus usos.
La nave, que se encuentra construida sobre una gran cubeta de hormigón en previsión de que un derramamiento accidental pudiese contaminar el suelo, tiene de 10 metros de altura y no cuenta con cierres laterales desde tierra hasta los 3,5 metros, para garantizar una óptima ventilación. En cuanto a la distribución interior, el espacio se encuentra dividido en tres grandes sectores según los productos a guardar, disponiendo de un área para líquidos inflamables y combustibles, otra para líquidos corrosivos y otra área del doble de extensión para guardar líquidos tóxicos. Los tres sectores se encuentran separados por muros resistentes al fuego. La zona exterior de la nave, delimitada por un muro de hormigón y una cerca metálica, tiene doble muelle para la carga y descarga de productos, así como rampas de acceso para carretillas elevadoras. Las estanterías de almacenaje se encuentran fuertemente aseguradas para evitar caídas accidentales.
La Nave ADR dispone además de 6 salas absolutamente sectorizadas e independientes para guardar productos incompatibles con los antes mencionados, como pueden ser los peróxidos orgánicos, fertilizantes, productos incompatibles con el agua y otros. La protección contra incendios también es muy exhaustiva, de manera que la nave se ha dotado de diversos sistemas y de agentes extintores.
Celmar, empresa gestora de la instalación, ya gestionaba el anterior almacén, donde más de 50 empresas le confiaban sus productos peligrosos y químicos. Al duplicar el espacio de almacenaje, Celmar tiene capacidad para triplicar la oferta de espacios para las industrias que necesitan estas instalaciones tan específicas.
El almacén ADR se encuentra dentro del recinto aduanero de la Zona Franca pero está a disposición de toda la industria, ya que es de libre acceso pese a que el recinto sea un área exenta de aranceles de importación e IVA bajo la vigilancia de la Guardia Civil. En este sentido, el hecho de que el almacén ADR se encuentre en un recinto aduanero sede de la Administración de Aduana de Carretera y Zona Franca redunda en sus buenas condiciones de seguridad y con una mayor posibilidad de tránsito aduanero.