El director general de Transports i Mobilitat de la Generalitat, Ricard Font, y el director general del Port de Barcelona, José Alberto Carbonell, han firmado un convenio para desarrollar un conjunto de iniciativas orientadas a incrementar la competitividad y a optimizar el funcionamiento del transporte de contenedores del Port de Barcelona.
Las acciones programadas irán encaminadas a garantizar la libre concurrencia en la contratación de servicios de transportes y a aportar estabilidad y transparencia en las relaciones comerciales. Así, se reforzará la actuación de las juntas arbitrales de transporte en los conflictos y reclamaciones en el ámbito portuario.
Otros objetivos del acuerdo son mejorar las condiciones de seguridad en el desarrollo de las actividades de transporte terrestre y la ampliación de zonas de estacionamiento que faciliten y optimicen la operativa de los vehículos. También se tomarán medidas para agilizar las entradas y salidas de vehículos en las terminales y depósitos de contenedores para realizar operaciones de carga y descarga. Asimismo, se impulsarán acciones formativas específicas orientadas al progreso técnico de los servicios y a la adopción de buenas prácticas empresariales. Además, la dirección general de Transports i Mobilitat y el Port de Barcelona cooperarán en materia de inspección de las actividades de transporte.
Ambas partes se comprometen a realizar un primer balance de cumplimiento de las acciones en el plazo de seis meses y a hacer seguimiento de forma periódica.
Elemento clave de competitividad
El transporte terrestre de contenedores es un elemento esencial en el funcionamiento del sistema portuario. Las entradas y salidas de mercancías en el puerto de Barcelona se hacen de forma predominante por carretera y el tráfico de contenedores ocupa una posición líder en el conjunto de transportes que se realizan en el recinto portuario.
La entrada en funcionamiento en el mes de julio de la nueva terminal de contenedores del muelle Prat y la ampliación de la capacidad del puerto generarán nuevos flujos de tráfico, lo cual pone de relieve la necesidad de disponer de herramientas eficaces de apoyo a las empresas de transporte terrestre de contenedores.
En los últimos años se ha incrementado la oferta de los operadores terrestres en el puerto y también la posibilidad de elección por parte de los clientes. Así, un número muy elevado de empresas y trabajadores autónomos, con una flota superior a los 1.500 vehículos, se dedican de manera habitual a esta actividad.