La consultora Drewry Supply Chain Advisors estima que en 2008 las expediciones de carga aérea y marítima gestionadas por el sector transitario generaron un negocio de 260 mil millones de dólares; en 2009 esta cifra bajó hasta los 190 mil millones de euros. A pesar del descenso, la consultora asegura que los transitarios han podido mantener sus márgener a expensas del descenso de los fletes aplicados por navieras y compañías aéreas.
Cargadores vs transitarias
Las empresas, que intentan hacer frente a la volatilidad de los mercados y a las fluctuaciones del comercio internacional, están utilizando a los transitarios para reducir los costes fijos pero asegurándose los servicios y con ello conseguir desplazar ciertos riesgos hasta ahora intrínsecos a sus negocios.
Los principales cargadores están cambiando sus relaciones con las transitarias con el fin de encontrar fórmulas que permitan mejorar el nivel entre coste y eficiencia. La capacidad logística de los operadores, en términos globales bastante estable, puede llegar a ser una desventaja estratégica frente al descenso económico que se está produciendo. Así, las transitarias y los operadores logísticos son los que están asumiendo el riesgo que supone tener una capacidad excesiva.
Además, para reducir costes, los cargadores están externalizando en las transitarias servicios y actividades de promoción de las cargas que antes controlaban directamente. Generalmente la opción de externalizar, que se toma a raíz de un análisis de los costes internos y externos, ofrece la posibilidad al cargador de transformar unos costes que antes eran fijo en variables. Evidentemente se dan distintos niveles de subcontratación, dado que ésta siempre está en función de la capacidad de integración del transitario con el cargador y del grado de dependencia de éste con el primero.
Por otro lado, las transitarias están intentando a marchas forzadas adecuar sus estructuras a las nuevas condiciones del mercado y a las nuevas exigencias de los cargadores. Pero la caída en picado del comercio internacional ha conllevado que algunos operadores no hayan sido capaces de reaccionar con suficiente rapidez, con lo que no han conseguido que la reducción de costes se equilibrara con la caída de los ingresos.
El sector transitario sufre en 2009 pero mejora en 2010
Después de cinco años con crecimientos de dos dígitos, el volumen de negocio de las transitarias descendió un 8% en 2008 respecto a los datos obtenidos en 2007, según el informe Global Freight Forwarding 2009 de la consultora Transport Intelligence. Este dato tiene su relevancia porque no fue hasta el tercer trimestre de año que empezaron a decaer dramáticamente los volúmenes de tráfico.
En el mismo informe se pronosticaba que el sector transitario a nivel mundial acabaría el año 2009 con caídas del 30% en su volumen de negocio. Aunque para el período 2010-2012 el informe apunta una ligera recuperación. El porcentaje de crecimiento anual estimado se sitúa en un 1,9% para 2012 a nivel mundial; en un 1,5% para Europa; en 1,1% para Sudamérica; y en un 0,9% para Norteamérica.
Por modos de transporte, Transport Intelligence señala que el crecimiento del volumen de negocio de los transitarios en el sector marítimo será del 2,1% de media anual hasta 2012, alcanzando los 66.576 millones de euros; el sector aéreo experimentará un crecimiento inferior, del orden del 1,6% de media anual hasta 2012 y con una facturación estimada de 62.838 millones de euros.
Alentadoras expectativas de las transitarias europeas
Danske Bank elabora periódicamente, desde enero de 2009, el European Freight Forwarding Index que permite tomar el pulso a las expectativas de las empresas transitarías europeas respecto a la evolución del comercio internacional y los volúmenes de carga transportados. Los transitarios que contribuyen con sus datos a la confección del índice, valoran sus expectativas en un rango que va del 0 al 100.
En septiembre del año pasado, el 59% de las 128 transitarias que participaron en este índice, esperaban que los volúmenes de tráficos empezaran a mejorar a lo largo de los dos últimos meses de 2009. Así, el índice pasaba del nivel 50 en agosto al nivel 65 en septiembre, lo cual indicaba que los volúmenes de carga se estaban ya incrementando. Aunque en ese mismo mes, las expectativas de los transitarios pasaban de la cota 78 a la 75, lo cual se podía traducir en que los operadores esperaban que los volúmenes de flete mejoraran más allá del último trimestre de 2009.
En marzo de 2010, el European Freight Forwarding Index de Danske Bank continuaba dando buenas noticias. El índice referido a las expediciones de carga se situó en el nivel 75, el más alto alcanzado desde octubre de 2009, mes en que se situó en la cota 73. Por lo que respecta a las expectativas de las empresas trasitarias, estas pasaron del horizonte 72 de febrero al nivel 77 de marzo. Los principales aumentos en volúmenes de carga se dieron en el ámbito del transporte por carretera, subiendo el índice del nivel 49 de febrero al nivel 82 registrado en marzo.
Estos aumentos de los niveles reales de volúmenes de fletes confirman que se ha salido de la recesión del invierno y que el segundo trimestre del año ha empezado bien y con buenas expectativas.
Las adquisiciones han trazado un nuevo escenario
El mercado transitario europeo está dominado por 6 de las mayores empresas transitarias, que han sido creadas a partir de adquisiciones de sus más directas competidoras, los operadores norteamericanos como BAX Global, EGL o AEI.
Pero el mercado global sigue estando altamente fragmentado, dado que las 10 primeras empresas del ranking sólo controlan el 42% del mercado.
El ranking lo encabeza DHL, con un 8,8% de cuota de mercado; seguida por Kuehne+Nagel, con un 7,6%; DB Schenker, con un 5,8%; Panalpina, con un 4,2%; Expeditors, con un 3,3%; Sinotrans, con un 2,8%; Agility, con un 2,5%; UPS SCS, con un 2,4%; Ceva, con otro 2,4%; y DSV, con un 2,1%. El 58% restante del mercado está en manos de un elevado número de operadores.